La corona Rota.

Hola querido lector, hoy toca hablar sobre la segunda entrega de Steelhaven y si no has leído el primer libro, es mi deber informarte que podrías sufrir de un spoiler severo. Sin más, comencemos.

“El rey ha muerto… Ahora le toca a la ciudad”
Los héroes deben combatir…El rey ha muerto. Su hija, sola y sin haber mostrado aún su valía, ha heredado la Corona de Acero. Y una inmensa y sangrienta horda viene abriéndose paso implacable desde el sur, decidida a arrasar a Steelhaven.
La ciudad caerá.

Antes de enfrentarse al terror que se acerca, la ciudad debe aplastar el peligro que acecha dentro de sus murallas. Pero ¿y si el precio dela victoria es tan devastador como la derrota?

Y con esta premisa nos sumergimos en esta familiar ciudad. Desde el prólogo inicia la acción y en se instante te engancha hasta el final.

La trama es buena, pero en ocasiones quería simplemente pasar las páginas con Merrick, él nunca me agradó lo suficiente. Pero te prometo que pasada la mitad del libro, la vida de este hombre se pone interesante.

Hay buenos giros en la trama y este libro es parte aguas para la introducción de nuevos personajes que de cierto modo complementan perfecto.

Rag; la pequeña bribona, nos muestra parte de su ingenio para sobrevivir y a pesar de su corta edad, se las apaña perfectamente que te sorprendes. La suerte también es un don y ella lo demuestra.

Janessa, por otro lado se vuelve una mujer empoderada y fuerte. La ciudad necesita toda su fortaleza, llevar una carga de descomunal magnitud es demasiado, ella es tan humana como cualquiera. Me agradó, aún más, en esta segunda entrega, me hace ponerme en sus zapatos y desear lo mejor.

Kaira, en realidad es un personaje muy lineal y que sabe muy bien hacia donde apunta. Pero en esta ocasión se muestra más humana y sus sentimientos afloran. Se quita un poco la etiqueta de “guerrera fría”.

Wyland, bueno este muchacho empieza a comprender que es más de lo que la gente le hace creer; sigue con sus miedos pero incluso logra cosas que ni él imaginó para sí.

Bueno, Nobul me sorprendió bastante. Es un hombre de acero que intenta luchar para librarse de su propia mierda, de este modo lo considera él. Amé la de este hombre y sobre todo, sus decisiones. Un guerrero formidable con mi más eterna admiración.

Sentí un frío a lo largo de estos cuatro centenares de páginas. ¡Nos faltó Río!, en realidad se habla de él y el trato con el Padre de Asesinos, pero nuestro muchacho brilla por su ausencia y de verdad deseo que en la tercera entrega haya más de él, de lo contrario desfalleceré cual dama antaño. Esta entrega fue utilizada para introducir a otros personajes, que con seguridad ayudarán a la guerra que desde ya, llegó a la ciudad.

Adoro la manera en la que Richard Ford acomodó todos los elementos para que al final te muestre un desenlace que fue brutal.

Este mundo es maravilloso y siempre aparece algo nuevo que te deja esperando más.

La lectura resultó muy agradable.

Espero sinceramente que continúes la trilogía y te empapes de ella, sin más nos leemos pronto. Ten un buen viaje, este libro lo promete, con seguridad.